“Todos los medios nacionales están alertando sobre el efecto de la sequía en la economía. La larga sequía nos dejará a los argentinos con muchos menos dólares de los que necesitamos para que la economía funcione, y claramente es consecuencia directa del cambio climático. La situación que viven los productores es terrible, la biodiversidad está siendo gravemente afectada por los incendios y por la falta de agua, sumado a que ya hay mucha gente que tiene y tendrá más problemas para acceder al agua de subsistencia en nuestro país”, declaró Verónica Geese.
“Ante esta situación es urgente que tomemos conciencia de que el cambio climático no es una preocupación de países ricos o de hippies, y que debemos exigir a nuestros dirigentes acciones reales, que necesitamos discutir cambios que integren la solución a los problemas ambientales con el desarrollo y la igualdad de oportunidades para todos, no es fácil, pero tiene que estar en la mesa de discusión de todos”, dijo la referente del espacio Yo Amo Esperanza.
“Argentina es un país con grandes desigualdades y problemas estructurales. ¿Es posible enfocarse hoy en los temas ambientales cuando hay otros tan urgentes? Una cosa no quita la otra, es más, están naturalmente atadas. Seguro que hay problemas que nos parecen más urgentes para el país, como la pobreza y el narcotráfico, pero tenemos que entender que no será posible solucionarlos sin priorizar el ambiente, puede sonar muy inocente, pero cuidar el lugar que nos posibilita la vida es la base moral sobre la que debemos reconstruir una sociedad justa.
No nos dejemos engañar con discusiones de blanco o negro, ya sabemos que eso nos trajo hasta esta crisis económica y ambiental, no es pobreza versus ambiente”, agregó Geese.
La ex secretaría de energía recordó que se presentó un libro sobre estos temas en el cual ella escribió un capítulo sobre bioenergías.
“¿Por qué la energía tiene tanto peso cuando se habla de cambio climático? Porque las fuentes de energía que la humanidad ha elegido usar en los últimos 200 años son las que han causado el desastre ambiental que hoy sufrimos todos. Obviamente no todos los países son ‘culpables’ en la misma medida, porque cada uno hizo usos diferentes de los recursos naturales, y por eso las discusiones que se llevan adelante en el marco de las reuniones de la ONU cada vez tienen menos resultados, porque si bien es cierto que todos debemos actuar contra el cambio climático, hay una gran resistencia de los países y corporaciones petroleras a acelerar los cambios que son necesarios”, manifestó.
“La energía está en todo lo que hacemos, pero hoy es más importante que nunca antes en la historia y determina las posibilidades de desarrollo de cualquier persona, es por eso que en Argentina deberíamos tomarlo como punto central de las campañas electorales, más allá de las tarifas, porque el ambiente y la economía necesitan definiciones consensuadas y estables para salir de las eternas coyunturas en las que siempre ganan los mismos actores. Primero hay que solucionar los problemas más urgentes y después habrá tiempo para estos temas más marketineros”
“Obviamente la falta de dólares traerá consecuencias para todos, pero como siempre las sentirán más los sectores más vulnerables de la economía”.